→ English
¡Socorro! No; no os estoy pidiendo que salvéis mi alma, es que tengo un problema gordo (o al menos a mí me lo parece) y para el que no acabo de encontrar solución.
Como muchos ya sabéis, y si no, os lo digo ahora, no tengo teléfono móvil —se oyen chillidos de pánico e incredulidad—. Hace unos meses me abrí cuenta en instagram a pesar de ello porque me parece una plataforma divertida en la que compartir fotos que quizás aquí en el blog no tienen cabida: pequeños momentos, chorradas, avances de algún proyecto... ¿Cómo lo hice para publicar? Muy fácil: instalando un emulador de Android llamado Bluestacks en mi ordenador y subiendo las fotos desde allí como si se tratase de un verdadero móvil.