Tacita de amor |
→ English
¡Después de casi siete años he tejido mi segundo amigurumi! El primero fue una ovejita dormilona que me enamoró por su dulzura pero me pareció tan difícil que me ha costado decidirme a hacer el siguiente. No me arrepiento en absoluto: pasados los años he adquirido más experiencia y ahora sé con qué puedo atreverme. Ya puedo decir que estoy lista para continuar por este camino. :-)